El alcalde Claudio Radonich ya se reunió con el ministro Enrique Paris y el subsecretario de Turismo, José Luis Uriarte, para coordinar esta posibilidad. La idea es potenciar además el paso por la comuna para quienes visitan la Antártica.
A fines de mayo, el ministro de Salud, Enrique Paris, hablaba de Magallanes con “esperanza”. “Siempre se ha dicho, y algunos expertos lo han dicho así, que la Región de Magallanes adelanta un poco lo que va a ocurrir en el resto del país en el futuro”, dijo durante el balance del 27 de mayo. “Si Magallanes está disminuyendo, espero que eso también se traslade al resto del país”, añadió.
En ese momento, Magallanes llevaba varios días disminuyendo sus casos y presentaba una baja del -12%. Luego de experimentar los peaks de la pandemia con anterioridad al resto del país y de llegar a 1.700 casos activos en octubre de 2020 y casi 900 a fines de abril de 2021, ese día la región registraba 558 personas portando el virus. Según el último informe epidemiológico del Minsal, el 31 de mayo esa cifra había bajado a 397.
La disminución está estrictamente asociada a otro número que va al alza: el nivel de vacunación en la región, donde más de 97 mil personas ya terminaron su esquema de vacunación de un universo de 141 mil susceptibles a recibir la inmunización. En total, un 70,5% de la población objetivo ya está totalmente vacunada contra el covid-19, según los registros del DEIS. Eso permite que en la zona empiecen a aparecer planes optimistas, como el que la Municipalidad de Punta Arenas ya presentó a las autoridades sanitarias.
“Como ciudad nos hemos autoimpuesto la meta de llegar al 90% de vacunados y la buena noticia es que vamos en más del 84% con primera dosis, por lo tanto, en algunos días podríamos alcanzar eso y esperamos que un mes después podamos llegar al 90% con doble dosis, lo que sería un récord total y absoluto en Chile y el mundo”, dice a Emol el alcalde de Punta Arenas, Claudio Radonich (RN). Para llegar a ese objetivo, los equipos municipales siguen trabajando de lunes a viernes y se han instalado vacunatorios móviles, que entregaron en los últimos dos fines de semana más de 800 dosis a rezagados cada vez, es decir, alcanzaron en total el 12% del universo de rezagados en la ciudad.
“Hemos retomado la velocidad de vacunación y el pase de movilidad ha significado que muchas personas que estaban en dudas se hayan vacunado”, cuenta Radonich. “La experiencia que se ha tenido indica que los contagios hoy se producen básicamente en las personas no vacunadas, así como también los casos graves. Tenemos UCI y UTI bastante más despejada y las personas que han entrado ahí lamentablemente no han cumplido con todas las vacunaciones”, resume. Por eso, en la comuna ya se aventuran a mirar hacia el futuro.
Ciudad piloto
Radonich viajó a Santiago para reunirse con dos autoridades: el ministro Enrique Paris y el subsecretario de Turismo, José Luis Uriarte. Sus objetivos eran dos, uno a corto y otro a mediano plazo: volver a plantear que el índice de vacunación se considere directamente en los avances del Paso a Paso y la posibilidad de que, pasado septiembre, la ciudad pueda incorporarse al “pase verde” internacional.
“En ese momento va a estar terminando la temporada de verano en Europa,
donde están con este pase verde, y vamos a ver finalmente cómo estuvo operando,
de forma que nuestra región sea piloto
para la apertura a la recepción de turistas extranjeros y chilenos vacunados
con dos dosis certificadas, además del ingreso con exámenes de antígenos”,
cuenta el alcalde.
“En septiembre va a estar terminando la temporada de verano en Europa, donde están con este pase verde, y vamos a ver finalmente cómo estuvo operando, de forma que nuestra región sea piloto para la apertura a la recepción de turistas extranjeros y chilenos vacunados con dos dosis certificadas” Claudio Radonich.
En paralelo, la autoridad comunal ha establecido contacto con la Organización Internacional de Operadores Turísticos Antárticos (IAATO, por sus iniciales en inglés), quienes le han mostrado disposición a usar el puerto de Punta Arenas como base, en lugar de Ushuaia en Argentina, frente al cual presentan aprensiones sanitarias, dice.
El acuerdo permitiría a los cruceros recalar en la zona a cambio de dos cosas: que las embarcaciones se aprovisionen con productores locales de elementos como lechugas y agua mineral, y que los turistas tengan que quedarse en Punta Arenas antes de regresar. “No es que del avión se vayan al barco, del barco a la Antártica, de la Antártica al barco y después al aeropuerto”, relata Radonich.
“La idea es que se queden un día y medio más en Punta Arenas, de tal manera que poder abrir una oferta de ocio y de servicios incorporando a la comunidad. Por ejemplo: está de moda elaborar productos con lanas de acá. Entonces la idea sería llevar a que personas puedan ver cómo se hace este trabajo, que puedan tejer. Acá tenemos la cervecería más austral del mundo, que ha funcionado durante 120 años. También pueden hacer kayak en el estrecho. La idea es involucrar más a los proveedores y emprendedores de la zona”, dice.
“Tanto el ministro Paris como el subsecretario de Turismo se abrieron a la posibilidad de que nuestra región sea un pilotaje y de que, por cierto, este 90% de vacunación sea una marca registrada no solo para poder abrir el turismo, sino también para dar más movilidad a nuestros vecinos y mantener este estándar”, añade Radonich. “Queremos que en nuestra ciudad comience a funcionar el sector turístico con seguridad sanitaria”.